A veces es difícil dar un toque tan marcado en el interiorismo, por temor a encasillarse quizás, pero hemos visto ésta apartamento tan femenino que no pudimos resistirnos a mostralo, aprovechando que hace unos dias festejamos el día de la mujer…

Este apartamento en el centro de la cuidad de Copenhage y pertenece a una diseñadora gráfica, a la que sin duda le encanta el rosa, sobre todo en su versión más subida o “chicle”.

En cada cuarto del piso encontramos algo rosado: una cómoda, cojines, telas y otros pequeños objetos interiores.

Incluso una nevera, algunos empapelados y las etiquetas adhesivas de la pared, una lámpara, y algunos otros elementos de decoración son rosados. A fin de lograr destacar todos éste contrate, la mayor parte de paredes y suelos de madera son pintadas en el blanco puro. El contraste entre blanco y rosado siempre resulta muy impactante…no les parece?

Vía: Delikatissen