El estilo hindú se caracteriza por la variedad de motivos en estampados, brillos, hermosas telas y coloridos adornos y su esencia está basada en la religiosidad y culto a las divinidades…

Este estilo es muy atractivo, alegre y la comodidad también es algo fundamental.
Si quieres decorar tu casa de esta forma no necesitarás comprar muebles caros, con solo unos toques ornamentales podrás aclimatar los espacios y cambiar totalmente su aspecto.

La esencia de esta decoración repara en una cultura por demás mística, por lo tanto, encontraremos con frecuencia a las típicas figuras que representan divinidades.

Los motivos religiosos estarán presentes siempre en tapices, alfombras, telas y pinturas junto con decorativos arabescos en colores fascinantes.

Lo que no podrá faltar nunca son los inconfundibles cojines de telas características. Generalmente se utilizan sobre el suelo brindando comodidad, pero tú puedes combinarlos con tus muebles sin ningún problema.

En este estilo sabemos que hay infinidad de colores, pero predominan los llamativos cálidos en combinación con dorados y plateados (se debe básicamente al culto religioso al Sol). También, los textiles rústicos se combinan muy bien con telas brillantes y las paredes pueden ser adornadas con tapicerías. Por otra parte, la seda es propia de esta cultura y se utiliza muchas veces en cortinas.

Cuida de no saturar los ambientes con estos ornamentos tan llamativos, podrías lograr un efecto caótico no deseado, por lo mismo trata de combinarlos con muebles de colores neutros y líneas simples.

Contrariamente, si tienes la suerte de adquirir un mueble original hindú (que generalmente son muy llamativos), procura resaltar su carácter transformándolo en un verdadero punto focal.

Vía: Decorailumina